Origen

A partir de 1946, año en el que se celebró en Caracas la Asamblea General del Instituto Panamericano de Geografía e Historia, IPGH, nació la idea de crear un centro panamericano dedicado a los estudios e investigaciones geográficas. Esta brillante  iniciativa saltó al año 1968, a la ciudad de Quito, donde se llevó a cabo el Primer Simposio Continental de Geografía y Cartografía.

La idea tomó fuerza en la IX Asamblea General del IPGH realizada en Washington, en 1969, donde se dieron inicio a varias gestiones por parte del IPGH, a la par con la Sección Nacional del Ecuador, en cuanto a la definición de actividades y requisitos que debían cumplirse para la creación tan anunciado centro de investigaciones geográficas de estatura continental.

Luego de 27 años de haber presentado varias propuestas al IPGH para la creación de un centro de estudios e investigaciones geográficas a nivel panamericano, llegamos a la X Reunión de Consulta sobre Geografía, celebrada en Panamá los meses de abril y mayo de 1973, donde se acordó, entre el gobierno del Ecuador y el IPGH, en calidad de organismo especializado de la Organización de Estados Americanos, OEA, la creación del Centro Panamericano de Estudios e Investigaciones Geográficas, CEPEIGE, con sede permanente en Quito – Ecuador.

Primer curso internacional de Geografía Aplicada, 1973

El 3 de octubre de 1973 se suscribió un convenio de complementación, que dio origen al primer Curso Internacional de Geografía Aplicada bajo el título de “Nuevos Métodos para la Enseñanza e Investigación en la Geografía Moderna”, para dicho curso colaboraron los doctores C. Minkel (Universidad Estatal de Michigan), T. Martinson (Universidad Ball State) y R. Thomas (Universidad Estatal de Michigan). Contó con 33 participantes que representaron a 17 naciones integrantes del IPGH.

¿Por qué Ecuador fue elegido como sede principal?

Fue elegido como sede principal del CEPEIGE por múltiples razones, entre ella, el Ecuador está en la mitad del mundo, lo que provee de elementos naturales dominantes de su geografía en las que asombra sus zonas geológicas: las islas encantadas, montañas y volcanes, costas, ríos, lagos, y la inmensidad de la selva. En definitiva, y para los grandes y pequeños intereses empeñados en estudiar el espacio y su relación con el ser humano, el Ecuador es un verdadero “laboratorio geográfico”